Muffins Dukan

¡Mmmm, que ricos que me quedaron! O, tal vez es que con esto de la dieta, poder comer estos muffins sabiendo que no me la estoy saltando sienta mejor!! Son muy fáciles de preparar, muy rápidos y con un resultado muy bueno. En la dieta Dukan un ingrediente básico es el salvado de avena, y en esta receta es la base, junto con el salvado de trigo. EL salvado de avena tiene muchas propiedades beneficiosas para la salud (es saciante ya que se hincha en contacto con el agua, es adelgazante ya que absorbe calorías en el intestino delgado, reduce el índice de colesterol, protege contra la diabetes, entre otras muchas propiedades), además es muy versátil a la hora de utilizarlo en la cocina, para postres, en yogures, para pan, etc.

Os tengo que advertir que tanto el sabor como la textura son diferentes de a lo que estamos acostumbrados, o por lo menos de lo que yo estaba acostumbrada, porque siempre había hecho los pasteles y magdalenas con harina, y en este caso no se utiliza ni una pizca.

Ingredientes:


Para los muffins



2 huevos
1 cucharadita de levadura
4 cucharadas soperas de salvado de avena
2 cucharadas soperas de salvado de trigo
2 cucharadas soperas de queso blanco para untar light 0%
Edulcorante en polvo al gusto
Unas gotitas de aroma de frambuesa

Para el glaseado



1 clara de huevo
Un vaso/taza grande de edulcorante en polvo
El zumo de medio limón
Colorantes alimenticios (en este caso yo he usado los de siempre, de la casa Wilton, especiales para glaseado que no diluyen la mezcla)


Elaboración:

Empezamos precalentando el horno a 180ºC. En un bol mezclamos todos los ingredientes para los muffins, con las varillas eléctricas, hasta que quede una mezcla homogénea, queda algo líquida, no es lo mismo que una mezcla de harina. En un molde para muffins, yo tengo uno de 6, pero se pueden utilizar de esos individuales, vertimos la mezcla hasta ¾ partes cada uno, les dejamos un espacio para que pueda subir la mezcla sin problemas en el horno. Se deben hornear durante 10 minutos, o hasta que estén doraditos, para que por dentro queden bien hechos. También dependerá del horno de cada uno, como el mío es un poco autónomo.

Cuando estén, los desmoldamos y los dejamos enfriar encima de una rejilla.

Por otro lado preparamos el glaseado, en un bol mezclamos, con las varillas eléctricas, la clara con el edulcorante en polvo, hasta que suban, como a punto de nieve. Le echamos unas gotitas de limón y listo.

Ahora toca teñirlo con los colorantes alimenticios, ya sabéis que con muy poca cantidad es suficiente.

Pintamos los muffins, y los dejamos secar, aunque, al hacer el icing con edulcorante no queda igual que si fuese con azúcar, así que nunca se seca del todo. Es mejor que se pinten los muffins un poco antes de consumirlos.

Esta receta es una Dukan en toda regla!!!